A Pequeños Sorbos - Comentario de la Palabra del día de los Apóstoles de la Vida Interior

reflexiones sobre el Evangelio del miércoles 15 de mayo de 2024 (Jn 17, 11-19)

May 15, 2024 Los Apóstoles de la Vida Interior Season 6
reflexiones sobre el Evangelio del miércoles 15 de mayo de 2024 (Jn 17, 11-19)
A Pequeños Sorbos - Comentario de la Palabra del día de los Apóstoles de la Vida Interior
More Info
A Pequeños Sorbos - Comentario de la Palabra del día de los Apóstoles de la Vida Interior
reflexiones sobre el Evangelio del miércoles 15 de mayo de 2024 (Jn 17, 11-19)
May 15, 2024 Season 6
Los Apóstoles de la Vida Interior

- Presione el botón PLAY para escuchar la catequesis del día, y comparte si lo quieres -

+ Del Evangelio según san Juan +

En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró, diciendo: «Padre santo, guárdalos en tu nombre, a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos, yo guardaba en tu nombre a los que me diste, y los custodiaba, y ninguno se perdió, sino el hijo de la perdición, para que se cumpliera la Escritura. Ahora voy a ti, y digo esto en el mundo para que ellos mismos tengan mi alegría cumplida. Yo les he dado tu palabra, y el mundo los ha odiado porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los retires del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos en la verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así los envío yo también al mundo. Y por ellos me consagro yo, para que también se consagren ellos en la verdad.»


Palabra de Dios.

Show Notes

- Presione el botón PLAY para escuchar la catequesis del día, y comparte si lo quieres -

+ Del Evangelio según san Juan +

En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró, diciendo: «Padre santo, guárdalos en tu nombre, a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos, yo guardaba en tu nombre a los que me diste, y los custodiaba, y ninguno se perdió, sino el hijo de la perdición, para que se cumpliera la Escritura. Ahora voy a ti, y digo esto en el mundo para que ellos mismos tengan mi alegría cumplida. Yo les he dado tu palabra, y el mundo los ha odiado porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los retires del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos en la verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así los envío yo también al mundo. Y por ellos me consagro yo, para que también se consagren ellos en la verdad.»


Palabra de Dios.